La armadora de autos sueca Volvo y Uber hicieron pública una
sinergia por 300 millones de dólares para desarrollar coches autónomos, misma
que pondrá en la carrera a los Gotemburgo por el coche sin conductor, con lo
que retira todas sus reservas en materia.
Por lo anterior, la sinergia entre ambas compañías es para
habilitar de autonomía a la SUV XC90, y la inversión se dará casi en partes
iguales. La app de transporte adquirirá a Volvo
los autos, posteriormente los oriundos de San Francisco pondrán al vehículo
las preferencias para el servicio de transporte.
Volvo desarrollará al XC90 como punta de lanza en materia de
los coches autónomos, sin embargo, su sistema partirá de que en una primera
instancia se tendrá que hacer uso de un piloto dentro de la unidad.
Además, la inversión hecha por ambas compañías servirá para
la innovación e investigación en el hardware que compondrá al coche autónomo
(sensores de tráfico y obstacúlos), sin dejar de lado el software, parte
fundamental en los coches sin conductor.
Entre los planes de Uber está que una flotilla de 100
vehículos XC90 autónomos presten servicio en la Ciudad de Pittsburgh, la
operación de esta modalidad de transporte se calcula esté disponible a finales
de este año.
También, dentro de la estrategia empresarial de Uber es que
para el año 2021 tengan totalmente constituida su flotilla de coches autónomo,
por lo que pretenden que supere al servicio de transporte tradicional de la
compañía.
Una ventaja de este acuerdo entre ambas compañías, es que
ambas partes pueden llevar a cabo otros acuerdos con otras compañías, por lo
que no están casados unos con los otros. Por otra parte, la app de transporte aprovecha
la experiencia en seguridad de Volvo, la cual pretende que para el año 2020,
que ninguna persona que sufra una colisión dentro sus automotores pierda la
vida.
Foto: Cortesía de Volvo
GAEL
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